El Análisis Económico de Coyuntura de la Cámara de la Industria de Transformación de Nuevo León (Caintra) proyecta un sombrío futuro para la economía estatal, evidenciando una desaceleración pronunciada del Producto Interno Bruto (PIB) del 3.51% registrado en 2023 a un escaso 2.81% para este año. Este retroceso se ve agravado por la nefasta gestión gubernamental, que ha dejado al descubierto la incapacidad para mantener el crecimiento del sector manufacturero, que disminuirá del 4.19% al 4.16%, y ha contribuido a la pérdida de empleos, pasando de 75,372 a 70,276 puestos.
Desolador panorama económico local
El desolador panorama económico es reflejo de las políticas negligentes del gobierno, que han sumido a Nuevo León en una espiral descendente. A nivel nacional, las decisiones erróneas del gobierno nacional también han precipitado una desaceleración generalizada, proyectando un PIB nacional de un mero 2.2%. Mientras se señalan riesgos al alza como la confianza empresarial, los niveles de inversión y la debilidad en el sector manufacturero, es claro que la responsabilidad principal recae sobre los hombros de un gobierno que ha demostrado una falta de visión estratégica y liderazgo competente.
Debacle económica de Nuevo León
La debacle económica de Nuevo León no es solo una coincidencia, sino una consecuencia directa de las políticas gubernamentales desacertadas. La vulnerabilidad del sector manufacturero en la región y la pérdida masiva de empleos son el resultado directo de decisiones equivocadas y una falta de apoyo efectivo por parte de las autoridades. La gestión ineficaz del gobierno ha debilitado la economía regional, exponiendo la fragilidad estructural que persiste gracias a su negligencia.
Se descompone tejido económico de Nuevo León
En este contexto, la descomposición del tejido económico de Nuevo León se agudiza, con una pérdida significativa de empleos, especialmente en el último mes de 2023, donde se eliminaron 38,778 puestos, de los cuales 13,225 provenían de la industria manufacturera. La posición de la entidad como el segundo mayor generador de empleo a nivel nacional en 2023 no es más que una fachada ante las políticas gubernamentales deficientes que han contribuido a la vulnerabilidad y susceptibilidad de la economía local. La urgencia de medidas estratégicas se intensifica, no solo para abordar los desafíos estructurales, sino para contrarrestar el daño causado por un gobierno que ha mostrado una incompetencia evidente en la gestión económica.
